En ocasiones, cuando llevamos a cabo labores de asesoramiento en APPCC, nuestros clientes tienen dudas a la hora de elegir un vehículo para realizar el transporte de los alimentos de una manera segura.
Esta es una etapa muy importante (pensemos en cocinas centrales que realizan el reparto de comidas) y no todo tipo de vehículos puede llevar a cabo el transporte de alimentos. Dependiendo del tipo de alimento y, sobre todo, de sus exigencias en materia de conservación se establecen diversos tipos de vehículos que pueden realizar este transporte. En el presente artículo repasamos de manera general que tipo de vehículos pueden llevar a cabo el transporte de mercancias perecederas y los requisitos que deben cumplir.
¿QUÉ SON LAS MERCANCÍAS PERECEDERAS Y CÓMO SE DEBEN TRANSPORTAR?
Para que los alimentos lleguen al cliente final en óptimas condiciones para su consumo es fundamental mantener la cadena de frío en su transporte. Los productos perecederos son aquellos que necesitan una regulación de temperatura para su transporte (productos refrigerados, congelados o ultracongelados).
Los tipos de vehículos que se utilizan para el transporte de mercancías perecederas son cuatro y dependen de las condiciones y temperaturas que pueden garantizar en su transporte, de tal manera:
• Vehículo Isotermo: con caja cerrada, construido con paredes aislantes mediante paneles, puertas, suelo y techo que limita el intercambio de calor entre el interior y el exterior.
• Vehículo Refrigerado: vehículo isotermo provisto de una fuente de frío no mecánica, por ejemplo placas eutécticas, depósitos de hielo seco, etc. que permite bajar la temperatura interior de la caja vacía y mantenerla con una temperatura exterior media de +30ºC. Dentro de este tipo de vehículos existen diversas categorías (de la A – D) dependiendo de que rango de temperatura es capaz el vehículo de mantener dentro de la caja (-10ºC / -20ºC…etc).
• Vehículo Frigorífico: vehículo isotermo provisto de un dispositivo de producción de frío mecánico (compresor, máquina de absorción, etc.) que permite bajar la temperatura interior de la caja vacía y mantenerla con una temperatura exterior media de +30ºC. Dentro de este tipo de vehículos existen también diversas categorías (de la A – F) dependiendo de que rango de temperatura es capaz el vehículo de mantener dentro de la caja (-10ºC / -20ºC…etc).
• Vehículo Calorífico: Vehículo isotermo provisto de un dispositivo de producción de calor que permita elevar la temperatura en el interior de la caja vacía y mantenerla al menos durante 12 horas (sin repostado) a un valor constante y no inferior a +12ºC. Dentro de este tipo de vehículos existen también dos categorías ( la Ay B) dependiendo de si el vehículo es capaz de mantener el rango de temperatura antes indicado con temperaturas medias exteriores de -10ºC (en el caso del A) y -20º (en el caso del B).
REQUISITOS Y CONTROLES QUE DEBE CUMPLIR UN VEHÍCULO DE ESTA CATEGORÍA
Las actuaciones e inspecciones en los vehículos de mercancías perecederas están reguladas por el Acuerdo sobre transportes internacionales de mercancías perecederas y sobre vehículos especiales utilizados en esos transportes (ATP). Dicho acuerdo es una reglamentación técnico-sanitaria que establece cómo deben transportarse los alimentos perecederos, especifica los requisitos que deben cumplir los vehículos especiales que los transportan y dicta también los procedimientos de control necesarios para asegurar su cumplimiento.
a) Control de conformidad antes de la puesta en servicio
Estos vehículos especiales deben seguir en su fabricación una serie de especificaciones técnicas, establecidas en el Real Decreto 237/2000 y Real Decreto 380/2001, y pasar una primera inspección, realizada por una serie de organismos acreditados por ENAC. Tras este proceso, el certificado de los vehículos nuevos tiene una validez de 6 años.
b) Inspección períodica
Una vez transcurrido este período se debe realizar una revisión cada 3 años. Este tipo de revisiones periódicas pueden ser realizadas por empresas de inspección técnica de vehículos (ITV) que se encuentren autorizadas para ello. Se emitirá acta de inspección y certificado de conformidad.
c) Inspección excepcional
Se realizan cuando se produce una circunstancia extraordinaria que implica una modificación (sustitución del dispositivo térmico, modificación de la categoría…etc) o reparación del vehículo (toda operación que implica reponer o sustituir más de un metro cuadrado de superficie exterior del recinto isotermo).
Tras pasar favorablemente los controles antes mencionados los vehículos especiales antes citados (isotermo, refrigerado, frigorífico y calorífico) obtendrán un certificado de conformidad que deben llevar a bordo o tener fijada una placa (según un modelo fijado por dicho acuerdo ATP).
Pero además de los controles sanitarios a los que están sometidas las empresas de transportes de alimentos o productos concretos, se encuentran certificaciones de seguridad alimentaria como IFS Logística, en los que el cumplimiento de estos requisitos permite al consumidor tener una garantía de que los alimentos que llegan a los puntos de venta cumplen con las condiciones higiénicas adecuadas para su consumo.
CONCLUSIONES
Cada vez estamos más acostumbrados a disponer de manera inmediata de los alimentos, esto implica largas distancias que esos alimentos tienen que recorrer para llegar al consumidor final. Por ello cada día adquiere mayor importancia la calidad del transporte alimentario, su reglamentación y su control para garantizar unas condiciones óptimas para su consumo final.
Finalmente no debemos olvidar que aquellos vehículos que transportan alimentos deben estar inscritos en el registro sanitario de alimentos, tal y como comentamos en nuestro artículo ¿Necesita un camionero la inscripción en el registro sanitario de alimentos?
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