En el presente artículo vamos a tratar algunas cuestiones relacionadas con el registro sanitario de alimentos que hemos visto suelen llevar a confusión. Para aclararlo repasaremos brevemente qué es el número de registro sanitario, para qué sirve y tipos de tramitación.
¿Para qué sirve el número de registro sanitario?
Uno de los principales objetivos que tiene la legislación alimentaria es procurar un nivel alto de protección de la salud de las personas. Por ello el Reglamento (CE) 852/2004 obliga a las empresas que quieran operar en el sector alimentario a comunicar a las autoridades competentes la actividad que quieran desarrollar así como su domicilio. Su finalidad es clara; que las empresas comuniquen lo que quieren hacer y dónde se encuentran para posilibilitar que la Autoridad Sanitaria pueda realizar una labor de control sobre las mismas. El registro sanitario es, por tanto, una herramienta administrativa al servicio de la Autoridad Sanitaria.
¿Quién tiene que tener registro sanitario?
A priori tenemos claro que deben estar inscritas aquellas empresas que produzcan alimentos. Pero la realidad es mucho más rica de lo que parece y la legislación exige la inscripción a aquellas empresas que se dediquen a:
– Alimentos o productos alimenticios destinados al consumo humano.
– Materiales y objetos destinados a estar en contacto con alimentos (publicamos un artículo sobre materiales en contacto con los alimentos que habla de ello).
– Coadyuvantes tecnológicos utilizados para la elaboración de alimentos.
Pero esta legislación no sólo hace referencia a la empresa que fabrica o produce el alimento. Se tiene en cuenta todo el recorrido que puede realizar un alimento desde que se produce hasta que se pone a disposición del consumidor. No hay que olvidar que una empresa puede elaborar un alimento, otro empresa diferente puede envasarlo y una tercera venderlo. El buen o mal hacer de cada una puede llegar a afectar al producto que llega al consumidor. Por lo tanto es necesario la inscripción de las empresas cuya actividad sea:
1. Producción
2. Transformación
3. Elaboración
4. Envasado
5. Almacenamiento
6. Distribución
7. Transporte (también los camioneros)
8. Importación de productos procedentes de países no pertenecientes a la Unión Europea.
Obviamente una empresa puede realizar únicamente una de estas actividades o varias de las mismas.
¿Qué tipos de tramitación de registro sanitario existen?
A la hora de llevar a cabo la tramitación del registro sanitario cabe distinguir entre empresas que precisen:
a) Autorización previa: empresas que manipulen productos de origen animal (de acuerdo con lo establecido el Reglamento [CE] 853/2004) y que requieren control previo para su inscripción.
b) Comunicación previa: la mera presentación es requisito único para que se tramite su inscripción en el Registro.
¿Qué tipos de registros sanitarios existen?
Como se ha comentado, el registro sanitario es una herramienta administrativa al servicio de la Autoridad Sanitaria. Su finalidad es clara; que las empresas comuniquen lo que quieren hacer y dónde se encuentran para posibilitar que la Autoridad Sanitaria pueda realizar una labor de control sobre las mismas. En España se contempla la existencia de dos registros;
Registro de carácter nacional: es el conocido como Registro General Sanitario Empresas Alimentarias y Alimentos (RGSEEA).
Registro de ámbito autonómico: gestionado por las Comunidades Autónomas. Al ser competencia de cada Comunidad Autónoma encontramos algunas que han desarrollado este registro (Andalucía, Galicia y Aragón entre otras) y otras que todavía no lo han hecho pero que tienen previsto crearlo.
La inscripción en uno u otro registro no implica mayor o menor exigencia. En ambos casos la empresa tiene que asegurar la inocuidad de sus productos teniendo que disponer de un sistema que así lo asegure (sistema APPCC).
En conclusión
Tras todo lo anterior y a modo de resumen, el número de registro sanitario es una herramienta de tipo administrativo que sirve a la Autoridad Sanitaria para identificar a una empresa.
La empresa alimentaria no está obligada a poner dicho número en el etiquetado de sus productos (aunque como estamos tan acostumbrados a verlo parece que nos da más confianza) salvo en el caso de las empresas a que se refiere el mencionado Reglamento (CE) 853/2004 ya que el número de registro tiene una especial relevancia. En este último caso el número de registro significa que las instalaciones han sido autorizadas por la Autoridad Sanitaria, la empresa pasa a estar incluida en un listado público de establecimientos autorizados a nivel europeo y deberán incluir dicho número en el etiquetado del producto o en la documentación de acompañamiento.
Si tiene cualquier duda o precisa obtener el Registro Sanitario, no dude en contactar con nosotros.
Síguenos y estarás al día de nuestras publicaciones:
Fuente imagen: Pixabay – achirathep
Al enviar el comentario, acepto la Política de privacidad y las condiciones del Aviso legal de Aizea.es.